Y las palabras toman su lugar.
Ayer eran luminosidad, ilumina, buena, bondad, con CrisMar.
Hoy, tienen este despertar, mimada y consentida.
Una persona con luminosidad, que ilumina, una persona buena, porque se llena cada día con la bondad que puede atesorar...
Una persona mimada, que sigue estando protegida y que recibe el cariño que necesita, una persona consentida, que recibe lo que demanda, a la que se desplaza o arrincona, a la par.
Qué difícil ver las circunstancias de uso.
Vayamos con María Moliner. Veamos a su luz los términos que nos ocupan:
consentido, -a. 1. Participio adjetivo. 2. Se aplica a la persona, particularmente un niño, demasiado *mimado y al que se consiente demasiado que haga lo que quiere. 3. Demasiado *tolerante.
mimado, -a. 1. Participio adjetivo. 2. Se aplica a las personas, particularmente a los niños, mal acostumbrados por exceso de mimo.
mimo. (Palabra posiblemente de origen imitativo o expresivo, aunque entremezclada en sus aplicaciones y derivados con el latin "mimus", comediante.) 1. Entre los griegos y romanos, *actor bufo, hábil en imitar a las personas. (...) 5. Delicadeza o *cuidado con que se trata una cosa.
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